Un café con Jesús nace debido a que en este confinamiento, debido a la pandemia, le he preparado mucho café a papá; hemos reído mucho, hemos hablado de la vida e increíblemente el viejo sabe mucho de la biblia y yo no lo sabía. A veces el ruido de la vida te roba momentos tan especiales como prepararle un café a tu papá y disfrutar de su compañía y una buena conversación, y espero un día poder tomar un café con Dios, sin azúcar, pues se endulza con su voz.